Juventud, divino tesoro

Juventud, divino tesoro

por La calle no se calla ~ 13 abril 2011

Si Cristina pensó que por alabar a la juventud todos le responderían sin objeciones se equivocó. No contó con que surgirían referentes jóvenes, con luz propia, y así fueron apareciendo intendentes y gobernadores, que no se conforman con una participación pasiva y además tienen ambiciones políticas de superarse.


Primero fue Scioli quien, sin hacer un enfrentamiento directo con la Presidencia, comenzó a generar desconfianzas en el oficialismo. Más tarde otros de los que se sumaron a la rebeldía generalizada fueron Mazza y Bruera, intendentes de Tigre y La Plata respectivamente. Ahora alguien que hace un tiempo se venía perfilando y que acaba de demostrar que cuenta con un apoyo total por parte de la ciudadanía salteña, el gobernador Juan Manuel Urtubey, le puso los puntos a la presidenta.

Con su estilo muy provinciano y sin levantar la voz, le hizo saber que el caudal de votos adquirido en su terruño no es propiedad del Gobierno Nacional, sino que responde a la aprobación con la que hoy cuenta su gestión. Envalentonado por esta situación, le envió un mensaje a la Presidenta diciendo que él no será un delegado del Gobierno Nacional en el territorio norteño. Si bien dice apoyar la política nacional, explicó que tiene sus disidencias con el poder central y se animó a decir lo que ni Cristina intenta esbozar: que la cercanía de Moyano es pianta votos.

Si bien Cristina Fernández cuenta con una aprobación muy importante, no cuenta con la obediencia absoluta de todos estos jóvenes dirigentes que le están marcando la cancha y no será fácil controlarlos. Parece que pronto cambiarán las reglas del juego en la política nacional y los modos K deberán ser reinventados.